Historia del Collar

La historia del collar

 Antecedentes

Yasynuvata se encuentra ubicada a las afueras de Donetsk, es un condado ucraniano, escondido entre enormes picos de montes con nieve en sus cortezas, que traían un olaje de ventiscas cada noche, espesa y fría, la gente de esos lugares se curtía, con espíritus de guerreros imbatibles, de leyendas que perduran toda una eternidad, las deidades de la sombras eran seres creados desde tiempos inmemoriales, existen por un motivo, con un propósito con ende relacionado a la humanidad, se puede describir este propósito como el vínculo entre el bien y el mal.

La relación que se puede tener en la vida, tiende a ser superficial o muy significativa con cada ente, en el mundo, cualquier momento, siempre cambiara nuestras la forma en que vemos la vida para siempre.

Una deidad de la sombra es un ser oscuro que paso por el umbral de la muerte, regreso a la vida, convertido en un feroz ser, maximizando los rasgos más marcados de su personalidad en su vida humana, los secretos se pierden, se convierten en seres sin luz, que añoran oportunidades, y sufren en silencio, todo podría volverse común, pero debemos tomar en cuanto algo su instinto se mueve por una necesidad imperiosa que es la de consumir sangre, la fuente de su vida eterna, la cantidad de esta sustancia en su organismo, puede ser la más mínima o verse sobrepasada a cantidades cuantiosas, sus habilidades, se desarrollan en base a la antigüedad de estos entes que duran siglos o toda una eternidad.

Su piel blanca es una característica que detona la necesidad de mantenerse hidratados de sangre, para poder pasar desapercibidos con un humano común, sus molares y colmillos son delgados y afilados, con una pigmentación blanquecina casi perfecta, no pueden mancharse, ni quebrarse, sus dentaduras perfectas son el principal arma de este depredador, si lo pudiéramos llamar así, ya que al pasar de los siglos, estos seres son inteligentes, racionales, y su salvajismo desenfrenado es acogido a la ansiedad de hambre que pasan en sus primeros años de creación

El impedimento más grande que estos seres tienen, es la luz del sol, la frontera del dominio, su desterró a la obscuridad, un simple rayo de luz, los evaporiza en cuestión de segundos, esa circunstancia siempre ha sido una limitante para su raza, la magnitud de vivir con tal maldición es caótica y aunque en la actualidad, han logrado pasar desapercibidos, esa debilidad ha beneficiado que la raza humana perdure por tanto tiempo sin problemas, la continua disputa por una solución los ha llevado al borde, de la extinción.